El día que conocimos «las 22 Curvas»:
Después de nuestra historia en la concentración de Medina Sidonia, recibimos un cartel de otro evento motero. Éste era en Vejer de la frontera, uno de los acontecimientos más originales que habíamos escuchado hasta entonces. Se trataba un concurso de fotografía con moto clásica; tenias que pasar por ciertos puntos del pueblo de Vejer y hacer una foto con la moto, para luego escoger la mejor impronta.
Poco tiempo estuvimos comentándolo en nuestra pandilla para decidir que queríamos formar parte de este evento también. Llamamos a Mari Carmen que organizaba el evento, miembro del motoclub vejeriego «Las 22 Curvas«.
Por motivos ajenos al motoclub, no fue posible hacer el evento después de aplazarlo en dos ocasiones. Esto nos entristeció por la peculiaridad de aquel programa tan singular. Pero no por ellos dejamos de tener contacto con la organización del concurso.
Un día decidimos ir a visitarlos; era una miniruta para salir a Vejer y conocer a quienes también tenían afición por la moto clásica.
Aquel día nos reunimos: Mikel, Tito Paco y yo con las Impalas nuevamente, «Brendy, La nueva y Maribel«, respectivamente. Nos replanteamos nuestra cita con ellos y nos marchamos el día marcado y a la hora establecida a conocer la sede del Motoclub «Las 22 Curvas«.
Pasamos por «La barca» de Vejer; en aquella ocasión, subimos por la carretera hacia Barbate, para encontrarnos de la manera más sencilla con la sede del motoclub vejeriego, donde nos estaban esperando.
Fue un placer conocer a Lolo «El molinero», Mari Carmen, José María, Manuel y los demás. Un motoclub pequeñito pero muy entrañable y, desde luego, siempre dispuesto a ayudarte a cualquier cosa que necesites.
No he conocido un motoclub que haga más eventos al año: recogida de Juguetes, eventos relacionados con las motos clásicas y cualquier excusa para reunirse. Desde entonces, conservamos una buena amistad con ellos y siempre nos tenemos en cuenta para cualquier evento motero que podamos compartir.
He de decir que aquel día la acogida por parte de ellos fue excelente. Compartimos momentos entrañables, como el almuerzo que nos habían preparado. Por aquel entonces no contábamos con nuestro motoclub aún y, en gran parte, a ellos les debo que este motoclub esté funcionando. Ellos me marcaron las pautas iniciales para proceder su creación.
Desde este motoclub, y mediante esta historia, quiero agradecer en nombre de todos los que fundamos esta asociación vuestra ayuda y simpatía con nosotros, «las 22 curvas«.
El Maldito, 26 de mayo de 2020.
2 Comments
Por fin ya en marcha, Felicidades.
Pasamos una mañana muy agradable, buena compañía, buenas motos, buena gente. Esperamos que todo os vaya bien, cobrado con nosotros dentro de nuestras posibilidades. Un saludo y nos vemos en la carretera
bonitas fotos